Usted es la nueva directora ejecutiva de Rhode Island KIDS COUNT. Para aquellos que no están familiarizados con esa organización, ¿puede darnos una reseña de lo que KIDS COUNT hace?

Rhode Island KIDS COUNT es una organización a nivel estatal encargada de abogar y crear políticas relacionadas a la niñez y que trabaja para mejorar la salud, seguridad, educación, bienestar económico y desarrollo de los menores en Rhode Island y está comprometida con la equidad y la eliminación de disparidades ocasionas por temas de raza, etnia, discapacidad, lugar de residencia, estatus migratorio, vecindario e ingreso. Nos enfocamos en todo el Estado, pero también en cada una de sus 39 ciudades y pueblos y hacemos énfasis en sus cuatro ciudades principales que son Central Falls, Pawtucket, Providence y Woonsocket en las que residen el 68% de menores de edad de diversas razas y el 64% de los menores que viven en la pobreza. Brindamos información relacionada al bienestar de menores, estimulamos el diálogo relacionado a temas concernientes a ellos, y promovemos la responsabilidad y acción en áreas normativas que pudieran estar relacionadas. Reconocemos que las disparidades persistentes e inaceptables por razones de raza y etnia son el resultado de un racismo histórico, sistémico y estructural el cual debe ser desmantelado para poder alcanzar la equidad, y poder así proveer oportunidades equitativas en donde todos los niños, jóvenes y sus familias puedan triunfar.

            Usted es la sucesora de Elizabeth Burke Bryant, quien se jubiló después de una distinguida carrera como dirigente de KIDS COUNT. ¿Qué le aconsejó al jubilarse?

Tuve la suerte de trabajar junto a Elizabeth durante cuatro años antes de esta transición, y luego tuve la fortuna de tener todo un mes de transición dirigida y tiempo para aprender antes de que ella se fuera. Me dio un sinfín de sabios consejos que me acompañarán mientras avanzo en mi papel de liderazgo. Una cosa que mencionó es que el liderazgo es algo difícil, pero si se cuenta con un equipo bueno y fuerte, se puede lograr. También me animó a que pusiera atención a mis corazonadas porque eso puede llevarme en la dirección correcta.

Antes de llegar a ser directora ejecutiva usted fue analista experimentada en políticas en KIDS COUNTS. ¿En qué consistía ese trabajo?

En mi función como analista experimentada en políticas, era responsable del análisis de políticas, apoyo y control de proyectos en las áreas relacionadas a la educación y el bienestar económico. Abogué para resolver las necesidades de alumnos y sus familias en Rhode Island cuando testifiqué por aumentos en las inversiones presupuestarias y la legislación las cuales tienen un impacto en la estabilidad y movilidad económica, en los planes de estudio, en la cultura docente y la preparación de iniciativas a nivel de educación superior y profesional y trabajé para garantizar que niños y jóvenes procedentes de familias de bajos ingresos, y niños de color, alumnos multilingües y alumnos discapacitados recibieran los recursos adecuados para que pudieran alcanzar sus metas. Hice muchos trabajos de investigación y soy autora de algunas publicaciones relacionadas a la educación y el bienestar económico. Fui parte de coaliciones y juntas de asesoramiento, hice presentaciones públicas y lideré talleres y sesiones de aprendizaje para jóvenes, padres de familia, docentes y miembros comunitarios.

Háblenos un poco de sus orígenes.

Nací en St. Louis, MO, y siendo joven me mudé a Trumbull, CT luego de que mi madre se ganara una increíble oportunidad de empleo en la ciudad de Nueva York. Mis padres me inculcaron una fuerte ética laboral, la importancia de la educación, y un respeto por nuestra herencia negra, así como un sentimiento de responsabilidad y obligación hacia mi comunidad. Me enseñaron a ser fuerte y enérgica, a que nunca se aprovecharan de mí, y a ser una luz en un día sombrío de alguien. Alentaron mi curiosidad, amaban mi idealismo, y fomentaron una profunda auto reflexión.

Me mudé a Rhode Island para asistir al Providence College en donde me especialicé en Estudios de Servicio Público y Comunitario con una especialización adjunta en Estudios sobre la cultura Negra. Durante mi estancia en PC, fui co-fundadora de la primera organización estudiantil de alumnos LGBTQ+ en esa institución de enseñanza (SHEPARD). Cuando fundé SHERPARD descubrí mi pasión por la justicia social, la defensa y la organización de movimientos políticos comunitarios.

            Después de PC, trabajé en Youth Pride, Inc., en donde lideré programas de protección escolar para LGBTQ+ y asistí a la Facultad de Docencia de la Universidad Harvard de donde recibí mi maestría en Administración Docente, Planificación y Políticas Sociales. Luego, seguí mis intereses y tuve la increíble oportunidad de trabajar y ser voluntaria en organizaciones sin fines de lucro de gran impacto tales como Youth in Action y Books Are Wings. Tambié fui docente/asesora en The Met Center en donde enseñé y aprendí de los más sorprendentes grupos de jóvenes y sus familias. También tengo entrenamiento en danza moderna y en Fusionworks Dance Company tuve la gran fortuna de cumplir con mi sueño de infancia de llegar a ser bailarina profesional.

            Una cosa que la gente no sabe de mí es mi edad. Algunas veces me veo más joven de lo que soy, lo cual creo que significa que me miran como chévere y en la onda, así es que, ¡no voy a revelar mi secreto! Sin embargo, mi esposa, mi hijo de 10 años y mi hija de 11 están en completo desacuerdo con esta conclusión.

La pandemia ha causado pérdidas y sufrimiento a tantas personas en Rhode Island, incluyendo a niños, por supuesto. ¿Cuáles son algunos de los puntos claves que estos menores de edad han enfrentado?

            La pandemia de COVID-19 impactó de muchas maneras a niños y jóvenes, desde preocupación y miedos sobre la pandemia, pesar y pérdida de seres queridos, pérdida de empleo y dificultades financieras a los padres de familia, hasta cierre de escuelas, aprendizaje remoto y modelos de aprendizaje híbrido. Estos retos resultaron en una pérdida importante de horas de instrucción, un aumento en preocupaciones por la salud mental, y complicaciones en las inequidades. La pandemia del COVID-19 sacó a la luz las crudas disparidades económicas, de educación y otras tantas, así como los retos que se interponen al éxito que los menores de edad pudieran alcanzar.

¿Pagan los menores de edad provenientes de otras razas un precio desproporcionado?

            Estos retos, pérdidas y sufrimientos causados por la pandemia afectaron especialmente a los menores de edad de color. A nivel nacional, los menores de edad negros representan el 14% de la población total de menores en los EE. UU., pero representan el 20% de todos los menores que perdieron a uno de sus padres por razón del COVID-19 hasta principios del 2021. La alta inseguridad financiera, el aumento de la inestabilidad de vivienda, el aumento del hambre entre los menores de edad, y la clausura de escuelas y la transición a un sistema de aprendizaje híbrido tuvieron un impacto en las oportunidades académicas y la salud mental de muchos menores de edad negros, latinos, y nativos estadounidenses y dieron lugar a un aumento en las disparidades académicas.

Describa los retos de salud mental a los que se enfrentaron los menores de edad, incluyendo los retos a los que se enfrentaron durante los largos periodos en que los alumnos pudieron asistir físicamente a la escuela.

Durante la pandemia del COVID-19, los menores de edad tuvieron muchos cambios en sus vidas diarias, incluyendo la clausura de escuelas y el aprendizaje virtual, el aislamiento de compañeros y adultos esmerados, las interrupciones en sus horarios, la inseguridad económica, el aumento del estrés y la inseguridad, y la pérdida ya sea de un padre de familia, de la persona que brindaba cuidados o de un ser querido. A nivel nacional, los niños y los jóvenes ya estaban sufriendo retos a su salud mental antes de la llegada de la pandemia, pero desde el inicio de la misma, ha aumentado el número de menores de edad que sufre de ansiedad y depresión. Actualmente estamos viviendo una crisis de salud mental tanto en Rhode Island como en el país.

¿Puede darnos una lista de algunos de los pasos críticos que el Estado, y Washington, deberían de tomar para mejorar el bienestar general de todos los menores de edad en Rhode Island?

Para mejorar el bienestar general de los menores de edad en Rhode Island, los legisladores deben dar prioridad a las soluciones equitativas para asegurar que los menores y sus familias reciban el apoyo de salud, académico y económico que necesitan para salir adelante y prosperar. Para poder apoyar a las familias durante la pandemia y su periodo de recuperación, es necesario que se hagan inversiones sustanciales y rentables en las áreas de cuidado de menores, RI Works, profesionales de la salud mental en las escuelas, apoyo a los alumnos multilingües, programas para después de la escuela, y cobertura continua de seguro de salud para todos los niños hasta la edad de 5 años. Debemos invertir en un sistema completo de cuidados de salud mental que apoye a niños, jóvenes y sus familias el cual haga énfasis en la prevención e identificación temprana y que provea el cuidado correcto, en el momento preciso, en el lugar apropiado y que apoye a los menores de edad a medida que crecen y se convierten en adultos.

¿Y qué pueden hacer los miembros de las comunidades para ayudar?

            La pobreza, la salud, la educación, el desarrollo temprano, y la seguridad tienen un impacto en todas las comunidades en Rhode Island. Todos los que viven en el Estado pueden aprender cómo estos temas tienen un impacto en sus comunidades locales al acceder www.rikidscount.org, si ven Rhode Island KIDS COUNT Factbook o si descargan su perfil comunitario [Community Profile].

            Su tiempo es un recurso valioso que puede compartir con su comunidad ya sea como voluntario o participando en una organización local que se dedique a temas relacionados al bienestar de los menores de edad. Para aquellas personas interesadas en mejorar las políticas que tiene un impacto en nuestras comunidades, visite el Rhode Island KIDS COUNT legislative tracking page para enterarse de las propuestas que está presentando la Asamblea General. Escriba o llame a su legislador para abogar por los menores de edad en su comunidad o testifique en una audiencia del comité. También puede unirse a la conversación y mantenerse al tanto si lee nuestras páginas de Twitter, Facebook, o Instagram.

¿Qué consejo les daría a los menores de edad en el Estado a medida que se encaminan hacia el futuro?

            A nuestros niños y jóvenes les recordaría que ellos no sólo son nuestro futuro, sino que también son los líderes de hoy. No hay una edad mágica en la que se es sabio, cada uno es sabio y experto por su propia experiencia. Compartan sus pericias al mismo tiempo que aprenden de todos aquellos que les rodean. Construyan relaciones con adultos que puedan ser sus mentores, que les den oportunidades para crecer, y que reconozcan el regalo increíble que ustedes son en este mundo.

            ¿Cuál sería su consejo a los padres de familia, tutores y otras personas que son importantes en el crecimiento y bienestar de un menor de edad?

            Usted es el mejor y más importante defensor de su hijo. Cuídese a sí mismo mientras cumple con esta función tan importante.

¿Cuál es el mejor consejo que alguna vez le hayan dado?

Siempre incluya “despierta,” “respira,” y “sobrevive” en su lista diaria de cosas para hacer. Le recordará lo importante que son estas sencillas funciones y le hará reconocer que vivir en sí, es un gran logro.

¿Quiénes son las personas, y qué experiencias, le prepararon para el camino que tomó y le llevó a la más alta posición en KIDS COUNT?

Mi camino has estado lleno tanto de experiencias maravillosas que me enseñaron cuánto nosotros, como humanos, podemos amar y levantarnos unos a otros; y también he vivido tragedias que dolorosamente me han enseñado qué tan impredecible, frágil y difícil es la vida. No estoy segura si esos momentos me prepararon para el camino en el que me encuentro hoy o si el camino en el que ahora estoy fue construido con la alegría, la risa, las lágrimas y las congojas causados por estas experiencias.

Me siento agradecida por las personas que han construido este camino, que me ayudaron a explorar este terreno, y mezclaron la lista de tonadas (por supuesto sin haber sabido las letras de las mismas) a medida que me adentraba en esta aventura. Mis padres, Gwendylon Jackson y Willie Parks, siempre fueron y por siempre serán mi inspiración y mis héroes. Mi hermano, mis hermanas elegidas, y mis tías son mis más grandes animadoras. Sarah, mi compañera de vida y esposa por 20 años, ha sido la roca que alimenta mi alma.

Durante mi niñez y juventud, participé en trabajo de servicio comunitario lo cual fue una increíble influencia en mi vida. Mi madre y yo éramos voluntarias asiduas en las cocinas comunitarias locales en donde se servían comidas y se fomentaba el sentido de comunidad entre los que tenían hambre.

La familia que elegí en Providence College me aceptó cuando di a conocer mis preferencias sexuales, cuando, en aquél tiempo, sólo había un número pequeño de alumnos gay y ninguna era persona de otro color. Esta familia me acogió, me amó, repartió peticiones y volantes conmigo y me reconfortó en tiempos difíciles.

Una de mis primeras jefas, mentoras y ahora mejor amiga, Rachel Legend, me ayudó a reconocer mi liderazgo, a ser una defensora más firme, y a no temer a mi propia voz. Elizabeth Burke Bryant reconoció mi liderazgo, alimentó mis intereses y me dio la oportunidad de desarrollar, crecer y volar.

            Mis hijos me anclan y me hacen recordar que aún los gestos, las interacciones y las afirmaciones más pequeñas pueden hacer la diferencia. Mi increíble escuadrón de sobrinas y sobrinos talentosos, fieros, alegres, y valientes me hace reconocer lo que está en juego.

 ¿Cuáles son sus metas para Rhode Island KIDS COUNT ahora que ha tomado el

mando?

Rhode Island KIDS COUNT continuará siendo en el Estado la organización dirigente de

políticas para el bienestar y defensa de los menores de edad al proveer información independiente, fiable, y completa con respecto a los niños y jóvenes en Rhode Island. Dirigiremos con valentía y resueltamente con y para los menores de edad en Rhode Island hasta que logremos políticas y programas públicos equitativos que mejoren la vida de estos menores. Como parte de mi liderazgo, tengo la visión de aumentar el alcance de nuestra información para que sea más accesible a las comunidades para quienes se recoge y para aquéllos en quienes estas políticas tienen un mayor impacto y, en colaboración con socios fuera y dentro del gobierno, aumentar las oportunidades para jóvenes y padres de familia y personas que proveen cuidados a ser líderes en el área de cambios en las políticas.

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